¿Correr?, ¡correr!, dos formas de
expresar esta palabra con connotaciones diferentes.
-¿Correr?
- Para qué.
La vida para todos es una carrera,
para unos más larga, para otros menos, carrera que como todo tiene sus
obstáculos y dificultadas, carrera de vallas que hay que ir salvando, no es una
carrera de cien metros lisos ni otra de las muchas especialidades que existen
en atletismo.
Hay quien se pasa la vida corriendo y nunca
llega a obtener el objetivo que pretende, bien porque no programó bien sus
fuerzas, en esta arriesgada marcha de la
vida, o quizás porque no tuvo la integridad suficiente en continuar para
conseguir aquello que en un principio se planteó; otros, sin embargo, corren y
lo hacen pausadamente sin atropellos, salvando dificultades y al final
consiguen la meta que se propusieron.
¡Correr!, es la expresión de ánimo que
nos podemos aplicar en todo momento para seguir luchando continuamente y salvar
las lagunas, montañas, asperezas y espinas que se presentan en nuestro caminar
diario.
¡Correr!, sería como decir, ¡eureka!,
¡aleluya!, para celebrar que hemos conseguido aquello que pretendíamos.
Gandhi
Madre Teresa de Calcuta
Andrés Manjón y Manjón
Podríamos citar a infinidad de
personajes que han conseguido objetivos tras una vida de lucha, de esfuerzo, de
entrega a los más necesitados, éste, por el que hoy hemos celebrado una carrera
multitudinaria, fue D. Andrés Manjón.
Habitantes del Sacromonte (!890)
De origen castellano trajo la luz,
con su Pedagogía redentora, a esta ciudad de Granada liberando a las gentes de
uno de los barrios más abandonados de la ciudad, el barrio del Sacromonte.
Nuestra carrera solidaria va a seguir
el mismo itinerario que durante muchos años él, unas veces caminando, otras en
un humilde jumento, recorrió.
El Paseo de los Tristes, la Cuesta
del Chapiz, las Escuelas del Ave María, el Camino del Sacro Monte, la Calle S.
Juan de los Reyes, Calle de la Cárcel, Plaza Nueva y Carrera del Darro, fueron
los caminos que durante muchos años transitó.
Los jaramagos cubren las laderas del río Darro
La brisa que viene de Jesús del Valle, trayendo el aroma de los jaramagos
Ha explotado la primavera, la mañana
es espléndida, el sol luce a raudales, se respira la brisa que viene de Jesús
del Valle trayendo el aroma de los jaramagos que multitudinariamente asomando
sus cabecitas amarillas apretujados, unos contra otros, cubren las laderas del
río y los senderos de las montañas próximas, la Silla del Moro, el Cerro del
Sol, S. Miguel.
La Carrera del Darro, la calle más visitada de Granada
Según los meteorólogos se nos ha
marchado un invierno vestido de primavera y ha comenzado una primavera vestida
de invierno; parece que el tiempo de estos días pasados de calor se va a ir
tornando; disfrutemos de esta maravillosa mañana con esta carrera y con la
buena climatología.
El pistoletazo de salida lo va a dar
la Torre de Comares que, desde allá arriba, como abanderada de la Alhambra contempla a los participantes situándose en sus puestos de salida.
Se palpa cierto nerviosismo entre los
asistentes, deseosos de que comience la carrera; todo el Paseo se encuentra
abarrotado, es una masa multicolor, chándal de todos los colores, zapatillas
deportivas deseosas de portar al que quiere hacer brillantemente el recorrido,
algunos más atrevidos pantalón corto y camisetas dejando al descubierto los
brazos.
Algunos corredores calientan antes de comenzar la carrera
Algunos calientan moviéndose de un
lado para otro, otros charlan amigablemente, el componente es sumamente variado,
por ambos sexos: desde niños, adolescentes, adultos, antiguos alumnos, profesores, simpatizantes de la Institución, todos quieren en este día honrar al que lo dio
todo por Granada.
Planos de los diversos recorridos
Los recorridos serán distintos según
las diversas edades.
Pitufos, 250 metros. Alevín, Benjamín, 600 metros. Cadete, Infantil, 2000 metros. Juvenil, 3800 metros. Senior, 6000
metros.
Con mi nieto Pablo
Con mi nieto Francisco
Me he presentado en la salida, en
este lugar que durante muchos años fue mi morada habitual y que lo sigue
siendo; en estos momentos quiero participar como un corredor más para
contribuir a este homenaje a nuestro fundador.
He adquirido mi dorsal y me lo estoy
colocando, todos llevan un número, el mío es el cero, se comprende que a mis
años no puedo competir físicamente pero lo voy a hacer mentalmente.
Voy, mentalmente, a seguir a los corredores
El poder de la mente es enorme y
apoyándome en esa autoridad voy a seguir a los corredores y les voy a ir dando
ánimos y aliento para que puedan hacer todo el recorrido.
Me viene al pensamiento aquella
frase, que puede servir de ánimo a todos los participantes y que siempre he
tenido presente: “Para triunfar en la vida, no es importante llegar el primero.
Para triunfar simplemente hay que llegar, levantándose cada vez que se cae en
el camino”. ¡Ánimo!, porque nunca se ha logrado
nada sin entusiasmo y hoy es un día para demostrarlo.
Relucen los dorsales con un sol radiante
El Paseo está radiante, el bullicio
es enorme, se palpa y se respira el nacimiento de la primavera, se inhala el
aire puro y limpio que viene de Valparaiso y se desahoga al llegar a este
lugar; el bosque se ha cubierto de un verde especial y el gorjeo de los
ruiseñores es la mejor sinfonía relajante para todos, relucen los dorsales con
un sol radiante que hace unas horas dio la bienvenida asomándose por la ventana
de la Silla del Moro.
El sol da la bienvenida asomándose por la Silla del Moro
Toda la Alhambra está expectante, no sólo los guiris que se asoman...
Toda la Alhambra está expectante, no
son sólo los guiris que se asoman por los entresijos de los ajimeces
contemplado la falda del Albayzín que, en esta mañana, no sólo se ha adornado
con el encaje multicolor de las decenas
de corredores, sino que todas las torres miran hacia abajo y parecen sonreírse
por esta fiesta que en breves momentos va a comenzar.
Como film, traído del pasado, van
pasando escenas de los muchos sucesos que en el ayer, este Paseo fue fiel
testigo.
Las tropas de Muley Hacen, rey de Granada...
Las tropas de Muley Hacen, rey de
Granada, concentradas en el Paseo en marcha triunfal celebrando un
acontecimiento; una tormenta dio al traste, dispersando el escuadrón, con
armas y demás vestimentas y estandartes.
Salidas de los alumnos, portando banderolas , en diversas celebraciones (1910)
Los desfiles de los alumnos del
Colegio de la Casa Madre del Ave María, portando las banderolas con el anagrama
del Ave María, con D. Andrés Manjón a la cabeza y la banda de música, en
dirección a varios de los eventos que anualmente se celebraban en la ciudad:
Procesión del Corpus Christi, de la Virgen de las Angustias, hacia la Iglesia
de Santo Domingo, para conmemorar a Santo Domingo y el Santo Rosario
El sonido de las chirimías desde la torreta...
Los sonidos de las chirimías desde la
torreta de dicha casa, donde los ediles, ministriles y autoridades contemplaban
las corridas de toros que se celebraban en tablados situados sobre el río
Darro.
Los festivales del Corpus con
diversidad de zarzuelas, recitales poéticos, de cante jondo, cante moderno…, en
veladas veraniegas, se celebraron durante varios años a pesar del fresquito
que hacía tiritar a los espectadores.
Las fiestas del Barrio de S. Pedro (1940)
Las carreras de sacos y bicicletas,
para coger la cinta que había que llevar a tu idílico amor, que se celebraban
en aquellas añoradas fiestas de S. Pedro.
Los carros cubas llevando agua del Carmen de la Fuente
Los carros cuba, que desde el Carmen
de la Fuente, llevaban el agua a los vecinos de la ciudad, escucho el sonido de
las enormes ruedas deslizándose sobre el terreno terroso y el choque de los
cascos del mulo que tiraba de la acuática carga.
Vecinos con los que conviví durante
mucho tiempo, que me dejaron una huella en mi forma de ser, unos como alumnos a
los que procuré trasmitirle los principios fundamentales de la Filosofía
Manjoniana para hacerles personas completas y poder construir una sociedad más justa y razonable.
Niños y niñas, mujeres y hombres, hoy
día, me saludan con agrado recordando sus años escolares.
Una moto vespa, que me acompañó y un
maletín para prestar mis servicios como practicante a todo el barrio.
Resuenan en mis oídos los nombres de
“María la churrera”, “Carmen la huevera” y su esposo Ramón, el constructor
Girón, su esposa Conchita y sus dos hijos, los hermanos Pepe y Rafa de la
frutería Padre Manjón, hoy día convertida en bar “Puerta del Vino”, Manolico el
carbonero, con su carbonería, hoy bar "La Fuente",
D. José Cotes, profesor de latín del Colegio Ave María
D. José Cotes profesor de latín, su esposa Aurelia y sus cuatro
hijos, en el Hotel Reuma, “Pepe Chapuzas”, que tantos
arreglos caseros hacía a domicilio, “Molinica y su puesto de chuches, Pepico
con el síndrome de Down, a la cabeza de la procesiones, D. Antonio Avilés y su
esposa Dñª Adelaida dueños del Carmen de la Fuente, Manolo Gómez y la Sala de
Fiestas del Rey Chico, Ataulfo y su poesía.
El rapsoda Eduardo Fernández
El rapsoda Eduardo Fernández y su
esposa Conchita, D. José, Abad del Sacro Monte, D. Ezequiel que durante muchos
años fue el párroco del barrio, Molina y su taberna de nocturnos y juerguistas,
Dª Enriqueta Legaza, maestra en las
Escuelas del Ave María de la Quinta, Jesús y Mari Carmen de bollería la
Esperanza, Pepe Luis y Placiditas, tienda de comestibles, D. Nicolás Casares de
Tejidos Artísticos Casares, Emilio del Moral y su numerosa familia, por citar
una pequeña parte de vecinos, así como una innumerable lista de alumnos que pasaron por las Escuelas y que no habría espacio para
citarlos.
Da comienzo la carrera
Da comienzo la carrera, los
participantes se sitúan por categorías, subo la Cuesta del Chapiz incluso más
rápido, la mente no tiene límites de velocidad, D. Andrés Manjón, se une a la
carrera, veo a un grupo de chiquillos salir del Colegio, corren
vertiginosamente para coger el ronzal de
la “Morena” que sube portando a D. Andrés Manjón.
Viene de dar clase en la
Universidad y de solucionar el avituallamiento, con los diversos comerciantes
de Granada; la burra no necesita quien le dirija el camino lo tiene sumamente
asumido, pero se siente satisfecha del cariño de los chavales.
Subimos la Cuesta del Chapiz, me uno mentalmente a la carrera
Entrada a las Escuelas del Ave María (1919)
Mientras caminamos por el Colegio, D.
Andrés les va comentando a los alumnos, que le acompañan, la importancia de la
carrera de la vida de cada uno y lo que
hay que cumplir o intentarlo, por lo menos, para conseguir el triunfo al final,
ser unos buenos ciudadanos y personas completas.
D. Andrés Manjón con los niños en el Carmen de S. Juan (1920)
Las ricas candongas de los higos isabeles...
Mientras escuchamos el rumor del agua
de la acequia de S. Juan que corre trasversalmente por todo el Colegio, una candonga, de una de las higueras
del paseo central, cae en el camino, el grupo de chiquillos se precipita para
cogerla atropellándose e incluso causándole daño a uno que se ha herido, al
caer, en una rodilla, al final el higo maduro (candonga) es destrozado y no
sirvió para nadie.
D. Andrés Manjón explica la importancia de los valores en la vida (1916)
D. Andrés tomó la palabra para
decirles: la prudencia, es uno de los valores que siempre tendréis que tener en
cuenta en la carrera de la vida, no queráis alcanzar metas desaforadamente,
atropellando a los que os rodean, no seáis ociosos, sed sensatos con vosotros
mismos y con los demás, constantes y trabajadores, honrados en todas vuestras
acciones.
Los niños juegan a las canicas
Proseguimos nuestra carrera mental,
mientras caminamos por el Carmen de S. Joaquín, dos niños se están peleando
porque uno no le quiere dar la canica que le ha ganado; D. Andrés se baja de la
burra, lentamente se dirige a la cueva que le ha de servir a la Morena de
cuadra y descanso; en presencia de los dos que se pelean y de los demás alumnos
que, en gran número, se han unido al grupo les dice: en la vida hay que ser
justos, la justicia bien entendida es darle a cada uno lo que le corresponde,
así es que Juan, dale a Pedro su merecida bola que en buena lid te ha ganado.
D. Andrés en una de sus clases saca conclusiones morales relacionadas con la vida y los valores.
que deben tener las personas.
-
Pepillo,
¿porque has faltado a clase tres días seguidos?
Pepillo
quiere pasar desapercibido entre el grupo, pero D. Andrés insiste y le vuelve a
hacer la misma pregunta. Las miradas como dardos de todos sus compañeros le
tiene sitiado.
Con
voz tímida y casi imperceptible, Pepillo contesta.
-Es
que…, duda un momento antes de pronunciarse, quiere buscar una excusa, es que...
-¿Es
que…, qué?
- Me
he tenido que quedar cuidando a mi hermanillo, mientras mi madre se iba a hacer
los mandaos.
-D.
Andrés, dice Antoñillo,
-no es
cierto, todos los días se ha ido al río a hacer “rabona”, a bañarse y a coger
ranas.
-La
mentira, vilipendia a las personas hay que ser sensatos, sinceros y decir la
verdad.
En la placeta de la Capilla de las Escuelas, grupos de personas....
En la
placeta de la capilla hay un numeroso grupo de personas, en estos momentos
aplauden a los corredores de esta “carrera solidaria Andrés Manjón”, pasan
sudorosos y jadeantes, el calor del sol en esta mañana les está haciendo
mella.
De los parrales cuelgan hermosos racimos de uvas...
Sigo corriendo mentalmente, de los parrales que cubren y dan
sombra a esta zona del Colegio cuelgan unos racimos de uvas que le abren el
apetito a cualquiera y el deseo de cogerlos. Un grupo le está tirando piedras, lo
único que consiguen es destrozarlos.
Las granadas que se repartían los domingos...
-Veis lo que están haciendo estos irresponsables compañeros,
no esperan a que Francisco el guarda, las coja y las reparta equitativamente
entre todos, junto con las granadas e higos chumbos que el domingo se van a
repartir, hay que ser solidarios y no usar la libertad indebidamente cayendo
en un libertinaje.
D. Andrés Manjón le dice a Pepillo: la mentira vilipendia a las personas...
Así, de este modo, D. Andrés les ha ido comentando la
importancia de todos estos valores, tan fundamentales para que una persona se
considere educada, con el verdadero sentido de individuo completo, que es una de
las premisas más importantes que imperan en la filosofía manjoniana, la
educación; consiste en desarrollar cuantos gérmenes potenciales tienen las
personas con el objeto de hacer de los niños y las niñas hombres y mujeres cabales,
capaces de ocupar dignamente un puesto en la sociedad tan necesitada hoy día
de este tipo de personajes.
D. Andrés Manjón ha pasado por el comedor que se encuentra en el Carmen de Santa Ana, hay silencio, solo se escucha el rumor del agua de la fuentecilla que hay en el centro del patio, y el murmullo borboteante de la gran olla que destila el perfume de un rico potaje que va a hacer la delicias de los comensales.
Sale al exterior del Colegio por el portón de madera que hay en Puente Quebrada, y dirige su caminar hacia la Abadía subiendo parsimoniosamente por las “Siete Cuestas”
Nuestros corredores siguen pasando por el gran portón metálico de color verde que ha sustituido al de aquella otra época.
Sigo corriendo con ellos, subir la cuesta que culmina en el “Centro didáctico-cultural, La Chumbera” les merma enormemente sus agotadas piernas y alguno tiene que parar y subir caminando, mientras contempla desilusionado como se le adelantan otros corredores.
El rincón del Barranco de los Negros, se encuentra Curro Albayzín en la puerta de su cueva-museo, acompañado de un grupo de gitanos que aplauden el paso al ritmo de palmas flamencas.
Igual hacen otras gitanas en la entrada de la cueva de “María la Canastera”. Estos aplausos, vítores y aclamaciones, enervan e inyectan energías a los infatigables corredores.
¿Estará asomada Francisca Montiel, “La maestra Migas”, con sus alumnas, en el Barranco de los Naranjos?
-Pues, sí señor, allí estaba. La he encontrado algo más
envejecida, desde la última vez que la cité en uno de los artículos de mi blog,
los años no pasan en balde para todos.
“La Salvaora, Juan Andrés Maya Heredia, Iván, Juanillo a la guitarra, Estela Rubio, taconean junto a un grupo de danza que hacen mirar, hacia arriba, a los que corriendo pasan en estos instantes.
Llegamos al Peso de la Harina, allí se yergue con gran pose (la obra escultórica de Antonio Salazar), Mariano Fernández Santiago, “Chorrojumo”, que ha visto pasar el tiempo y mirando de soslayo nos ve pasar, aquel gitano que se hizo pasar por príncipe de los gitanos y finalmente se proclamó “Rey de los gitanos”.
Fue el pintor Mariano Fortuny que en un paseo por el Sacromonte ve en una fragua a tres hombres trabajando el hierro. Corría el año 1868 y el pintor había venido a Granada en viaje de novios. Eran tres gitanos harapientos que machacaban un hierro al rojo vivo a base de martillazos. Uno de ellos tenía la piel del color del cuero viejo, unas enormes patillas que bordeaban su boca y unos ojos del color del acero. Ese era “Chorrojumo”.
Fue este pintor el que le metió en la cabeza que él con su pintoresca figura, podría vivir de otra forma que no fuera la fragua. Para ello con la intención de hacerle posar para él, convence al gitano para que se hiciera un traje con polainas, camisa de chorreras y sombrero de catite, como si fuera de otro siglo. El mismo pintor le pagaría el traje a cambio de que posara para su pintura, cosa que hizo para numerosos cuadros en los que está inmortalizada la popular figura calé.
Fue entonces cuando nació el mito de Chorrojumo, quizás el personaje más pintoresco de cuantos han nacido en Granada.
Era de trato correcto y muy educado. A cambio de algunas
monedas se dejaba fotografiar e incluso servía de guía en la Alhambra a
personas que venían de fuera.
Se vanagloriaba de haber sido uno de los pocos gitanos que
habían ido al ejército, se casó con Dolores Román, también gitana del
Sacromonte tan pobre como él.
Chorrojumo y su mujer Dolores
Del matrimonio nacieron seis hijos que se ganaban el sustento diario pidiendo a los turistas extranjeros que llegaban a ver la Alhambra.
Del matrimonio nacieron seis hijos que se ganaban el sustento diario pidiendo a los turistas extranjeros que llegaban a ver la Alhambra.
Junto a la Alhambra los turistas que venían querían
fotografiarse con él. Al ser muy solicitado, hizo que se le subieran los humos
y agenciándose un cetro hecho con una vara de almendro se proclamó “Rey de los
gitanos”.
Su popularidad fue tanta que llegó a ser el granadino más
conocido. Contaba a los turistas aventuras de la Alhambra que había escuchado a
alguien sobre los “Cuentos de la Alhambra” de Washington Irving, tenía una voz
atractiva y dejaba a mucha gente extasiada cuando le escuchaban.
Así pidiendo y posando para todos aquellos que querían
fotografiarse a su lado, estuvo viviendo mucho tiempo, hasta que surgieron
competidores y el negocio se le vino abajo.
El año 1906 sufrió un infarto cerebral cuando subía por el
Paseo de la Alhambra, cayó al suelo como fulminado por un rayo. Tenía 82 años,
había muerto Chorrojumo, “Rey de los gitanos” y “Señor de los bosques de la
Alhambra”.
Lorenzo el Chapiz y Hernán López el Feri, los moriscos que vivieron en las “Casas del Chapiz”, actualmente “Centro de Investigaciones Científicas” y “Escuela de Estudios Árabes”, me parece ver asomadas sus sombras al borde del poyete que da a la Cuesta.
Bajamos la Cuesta del Chapiz, nos internamos en San Juan de los Reyes, calle de muchos recuerdos, me parece escuchar las fanfarrias de la comitiva que acompañaba a los Reyes Fernando e Isabel, vienen a celebrar una acción de gracias en la Iglesia que lleva su nombre, por la conquista de la ciudad.
El casco de los caballos, rastreando el suelo terroso de la
estrecha calle, el bufido de sus relinches, el choque metálico de las lanzas y
espadas de la guarnición militar que los acompaña me sobresalta. Estandartes y
pendones chocan unos contra otros haciendo la calle más agobiante.
Las piedras del molino harinero de Santa Inés, con su rítmico y monótono sonido van dejando el eco deslizarse rastreando las paredes de la calle, mientras unas monjitas se asoman por las celosías enmarcadas en las rejas de las ventanas del Convento de la Concepción.
Bajamos bordeando la Chancillería en el momento que, la defensora de la Libertad, Mariana Pineda, sale de la cárcel acompañada por el toque ronco de un tambor en dirección al cadalso para ser ejecutada.
Desembocar en Plaza Nueva para respirar el aire puro que baja del bosque de la Alhambra, por la Cuesta Gomérez y se abraza al que viene por el río Darro, es todo un alivio para los improvisados atletas.
dar ánimo y fuerzas a los corredores
Al comenzar la Carrera del Darro, la calle más bella del mundo, a más de un corredor le faltan las fuerzas, ven muy lejos el poder llegar al Paseo del Padre Manjón y es éste el que, por arte de magia, se ha desplazado hasta aquí para infundir ánimo y fuerzas.
El verde del monte, el murmullo del agua, el canto de los
pájaros complementan esta fiesta, mientras en las aceras numeroso público aplaude
el paso de los deportistas.
Es éste un lugar idílico donde no falta el pintor plasmando en su lienzo la belleza de cualquier rincón; estampa de sueño en la que se han inspirado muchos poetas y escritores para sus grandes obras literarias.
Estos ánimos infundidos a los corredores les hace tomar nuevas energías y llegados a la meta con los laureles del triunfo conseguidos, de nuevo se escuchan las palabras de nuestro fundador: alegraros con el triunfo conseguido, producto de vuestra constancia y lucha por obtener la meta dignamente, sin haber puesto zancadillas a los demás sino por vuestros propios méritos.
Sed sencillos y felicitar a los demás e incluso compartir vuestro triunfo; no os vanagloriéis en exceso poniendo en evidencia a los que no pudieron llegar a tiempo o se quedaron en el camino.
Sirva este archivo, como testimonio de un evento solemne celebrado el 30 de marzo de 2014, en honor de nuestro fundador que también
quiso unirse a la carrera en este día, para mostrarnos la importancia de los
valores que deben tener las personas en la carrera de la vida, y practicarlos para conseguir al final nuestra meta, el objetivo del hombre
completo corporal y espiritualmente, el encuentro con Dios y D. Andrés Manjón.
REPORTAJE DE LA CARRERA SOLIDARIA ANDRÉS MANJÓN
CARTEL ANUNCIADOR Y PREPARATIVOS PARA ESTE EVENTO
REPORTAJE DE LA CARRERA SOLIDARIA ANDRÉS MANJÓN
CARTEL ANUNCIADOR Y PREPARATIVOS PARA ESTE EVENTO
LLEGÓ EL ANSIADO DÍA DE LA CARRERA
PISTOLETAZO DE SALIDA
Dorsal número 1. D. Andrés López Osuna
REPORTAJE FOTOGRÁFICO DE ELOY MORALES PROFESOR DEL AVE MARÍA
José Medina Villalba
Muy bonita la carrera solidaria, hasta el día acompaño, la gente con muchas ganas de participar y muy amena. Como siempre digo, enhorabuena por su publicación
ResponderEliminarMari, como siempre, mi agradecimiento por tu comentario. Todo se desarrolló a la perfección, la mañana fue espléndida y la participación fabulosa, espero poder hacer la crónica de la próxima. Saludos. J.M.V.
EliminarMagnífico reportaje, magnífica carrera, precioso entorno, estupenda organización. ¡Qué más se puede pedir...! Que se repita y podamos disfrutar de otro día semejante.
ResponderEliminarAmigo Jesús, gracias por haberte restado un poco de tu tiempo e invertirlo en mi crónica, creo que el evento lo merecía.
EliminarLas facilidades que nos prestan, hoy día, las redes sociales, harán que ahí quede para la posterioridad, una página más de nuestra historia, la "HISTORIA DEL AVE MARÍA".
Es también, una manera más, de dar a conocer al mundo entero nuestra Institución Avemariana.
Mi blog, es seguido por mucha gente en todo el orbe y ésta será una página más para que nos conozcan.
Un abrazo afectuoso y de nuevo mi gratitud. J.M.V.
Simplemente dos palabras salidas desde el corazón: Impresionante y magnífico artículo.
ResponderEliminarFelicidades Don José Medina
Antonio Díaz, desde el corazón también, mi más sincero agradecimiento a tu comentario por la crónica al magnífico evento del día 30 de marzo. Un abrazo. J.M.V.
EliminarQue día tan espléndido nos hizo disfrutamos muchísimo gracias por esas
ResponderEliminarPalabras tan bellas enhorabuena y sigue
asi muchos besos
Francis, gracias por tus palabras a mi crónica, espero poder hacer la de la próxima. Un beso. J.M.V.
EliminarAmigo Pepe: acabo de disfrutar de una manera especial,este relato que has hecho de la carrera solidaria, y me tengo que rendir una vez más a la evidencia; el realismo descriptivo que imprimes a tus escritos, permiten al lector vivir en primera persona los acontecimientos que tan brillantemente describes, he recorrido el paseo de los tristes he subido nuestra querida cuesta del chapiz, he cruzado nuestro colegio y aunque todo lo he efectuado desde la butaca del despacho, te aseguro que estoy sintiendo como si realmente lo hubiera realizado en directo, no se si lo que siento es algo nervioso o son agujetas producidas por la carrera mental que me has permitido efectuar, de todas maneras la he disfrutado como un participante más. Un fuerte abrazo de tu amigo Pepe Cuadros.
ResponderEliminarEstimado amigo Pepe, nunca fue mi intención producir agujetas a los lectores de esta crónica, más si esas agujetas han sido producto de un recorrido placentero por los caminos del ayer traídos al presente, son para mí una gran satisfacción. Mi agradecimientos más sincero,por tu comentario, salido del corazón, a este amigo granadino por derecho, adoptivo por Sevilla y predilecto por Málaga. Un fuerte abrazo. J.M.V.
ResponderEliminar¡Extraordinario reportaje D. José! Ciertamente una vez más nos deja con la boca abierta leyendo todos esos relatos que son parte de la historia de Granada y de nuestro querido Ave María. La verdad es que D. Andrés Manjón sin duda echó una mano desde el cielo para que el día transcurriera sin incidencias y en un ambiente festivo. ¡Un abrazo!
ResponderEliminarEstimado amigo Eloy, mi agradecimiento a tu emotivo, como siempre,comentario, y cómo no, a permitirme guardar tus magníficas fotografías perfectamente captadas, las meteré poco a poco en el blog para que en cualquier parte del mundo que me siguen sepan que aquí no solo se practica la Pedagogía de la Educación y Enseñanza sino que también el arte fotográfico están en manos de un genial artista llamado Eloy, que forma parte de este colectivo avemariano. ¡Un abrazo!
EliminarHola Don José. Gracias, una vez más, por dejarnos en tu blog estás líneas tan emotivas y hermosas, en ellas describes de manera brillante lo acontecido en la carrera solidaria Andrés Manjón.
ResponderEliminarEnhorabuena por ello.
Un saludo.
Antonio Montes Jiménez
Estimado alumno, amigo y compañero Antonio, mi agradecimiento por tus palabras al comentario sobre mi crónica a la CARRERA SOLIDARIA ANDRÉS MANJÓN; gracias al granito de arena que todos pusisteis esa espléndida mañana, tuvo como resultado el magnífico éxito. ¡Un abrazo!
EliminarEntrañable crónica de la Carrera Solidaria efectuado por Medina Villaba. No podía ser de otra manera. Un mensaje educativo, avemariano, hermoso y humano. E imaginativo introduciendo en la carrera a personajes tan diversos como queridos, desde sus antiguos vecinos a maestros, a Chorrojumo... y, sobre todo, a D. Andrés y a su "Morena". Enhorabuena y ¡gracias! por tu permanente afán de educar en el más puro estilo manjoniano. "Docere ludendo".
ResponderEliminarJuan J. Gallego Tribaldos
Amigo Juan, mi agradecimiento por tu comentario a la "Carrera Solidaria Andrés Manjón" y tus elocuentes palabras.
EliminarFelicidades y enhorabuena a este abuelo primerizo que con toda seguridad estará rebozando de satisfacción.
Ánimo con el alemán.
Recibe un fuerte abrazo. J. M. V.