En la Facultad de Ciencias de la Educación, (18-3-2015)
se ha rendido homenaje a D. Antonio Correa Acosta, Maestro e Inspector de
Primera Enseñanza a través de su hija Dª Amelina Correa Ramón, Catedrática de
Literatura de la Facultad de Filosofía y Letras.
D. Antonio Correa Acosta
Un cielo cubierto de negros nubarrones cubría esta
mañana el cielo de la ciudad, la lluvia había llegado después de un preludio
anticipado de la primavera durante el cual el buen tiempo nos ha hecho
disfrutar de unos días apacibles en los que el frío de un riguroso invierno dio
paso a una agradable bonanza.
Aula Andrés Manjón
D. Andrés Manjón y Majón
Asistentes al acto en el Aula Andrés Manjón
Aunque la temperatura ha bajado, sin embargo, en el
interior del Aula de Andrés Manjón, el calor humano se dejaba sentir por un
público, que llenaba completamente la sala, expectante ante la presentación del
libro que iba a ver la luz en una “razón luminosa”, valga la redundancia, con
el título: “ A LA LUZ DE LA RAZÓN”.
Dª Mª Dolores Suárez Ortega
La presidencia compuesta por, La Sra. Vicerrectora de
Política Científica, Dª Mª Dolores Suárez Ortega, abrió el acto y fue
cediendo el turno de palabra a cada uno de los que componían la mesa
presidencial.
Dª Margarita Ramírez Reyes
En primer lugar intervino Dª Margarita Ramírez Reyes
Jefa del Servicio de la Biblioteca de la Facultad de Ciencias de la Educación.
Me siento emocionada ante este acto, fueron sus
primeras palabras; hizo alusión a la figura del padre de Dª Amelina cuyo libro no
solo es un homenaje sino que es un tratado pedagógico. Puso de manifiesto la
labor de la biblioteca de la Facultad, a la que se le han donado un número de 1380 volúmenes y 177
revistas, estando un porcentaje de un 10% de la colección en préstamo; a la Escuela de Magisterio la Inmaculada, adscrita a la Universidad, una parte de la biblioteca de su padre con cerca de 140 publicaciones, así como los 165 libros en el Campus de Ceuta.
El legado documental y de investigación, que honra a
esta biblioteca, se encuentra en el lugar que D. Antonio Correa habría deseado.
Terminó felicitando a todo el personal que trabaja y colabora con la
biblioteca.
D. Miguel Beas Miranda
D. Miguel Beas Miranda, Profesor Colaborador Extraordinario
del Departamento de Pedagogía, después de los saludos y felicitaciones a la
familia con la que le une una buena amistad, hizo un repaso histórico de la
evolución que la sociedad y la figura
del maestro ha experimentado a través del tiempo, desde la Constitución de 1812
hasta nuestros días.
El nivel económico ha condicionado la vida política,
social y cultural, D. Antonio Correa era consciente de la sociedad que le tocó
vivir. La recuperación del pasado es muy importante para entender el presente y
él supo hacerlo a través de los numerosos trabajos que realizó.
Moguer
Relata algunos de las experiencias siendo maestro en Moguer, poniendo como uno de
los pilares básicos que debe abanderar el maestro, la afectividad.
El maestro debe entregarse a sus alumnos, sabiendo muy
bien la coherencia que debe existir entre lo que se piensa y lo que se hace,
mis alumnos me querían y me respetaban.
Indicó los requisitos mínimos que se necesitan para ser maestro.
La Ley General de Educación del profesorado de E.G.B.,
puso de manifiesto el papel que debe ocupar el maestro en la sociedad por el
respeto, reconocimiento y trato digno que esta figura se merece, intentando
desterrar el pluriempleo para poder medio subsistir, y el “San Benito”,
refiriéndose al sueldo, que venía arrastrando, desde "in illo tempore" “tienes más hambre que….”
El maestro hoy tiene una titulación equiparable con la
que cualquier otro título universitario y debe sentirse orgulloso de serlo.
Al maestro siempre se le va a exigir ejemplaridad
Comentó las figuras importantes de la sociedad del
pasado: cura, médico, boticario y maestro, modelos de una comunidad sobre todo en los medios rurales, entre
ellos, a la cabeza, el maestro al que la
ciudadanía siempre le va a exigir
ejemplaridad.
Escuela experimental
Puso de manifiesto la figura de D. Antonio Correa al
que le unía una gran amistad, fue una persona que ejerció como maestro y como
inspector con un talante humano y con una cercanía propia de quien entiende su
profesión como un servicio a los demás. Aunque vivía dentro de un Sistema Educativo,
y era hijo de su época, supo también analizarlo de una manera crítica,
aportando soluciones a los problemas que se le planteaban.
Era muy sistemático,
con un pensamiento abierto, muy estructurado, y así, en su Memoria, además de
una fuente educativa que sin duda arrojará luz a cuantos se acerquen a la
Historia Escolar de la década de los sesenta del siglo pasado, encontraremos
una serie de observaciones que siguen siendo muy útiles para quien ejerza su
profesión de tanta responsabilidad como la del maestro.
Dª Isabel Cabrera García
A continuación tomó la palabra Dñ Isabel Cabrera García,
Directora de la Editorial de la Universidad de Granada.
Nos encontramos, comenzó diciendo, en la antesala de
la Feria del Libro y con este motivo están llegando novedades entre ellas una reciente sobre el Tango, tenemos en ciernes otro proyecto, en camino, sobre la
educación en el siglo XX que esperamos pronto se pueda editar, y por supuesto
resaltar este día feliz para contar con este libro especial de una gran figura
de la educación, el que hoy nos tiene
aquí reunidos.
Feria del libro
Destacó la importancia del libro como ejercicio de
comunicación científica, investigadora y de relación con los alumnos; resaltó
la aportación de la Universidad a la Cultura, y los índices educativos de la
lectura y la decadencia con respecto a ella, hay que animar a los alumnos para
que vayan a la biblioteca, pues no es suficiente solo el internet.
Una buena educación viene de una buena lectura.
Hizo hincapié en la importancia del libro y de la
lectura. La citación del valor del libro lo expresa diciendo: “que los muertos
viven en la memoria de los vivos”. Subrayó que una buena educación
viene de una buena lectura y resaltó la importancia del trabajo realizado por
Amelina en este libro que hoy nos trae aquí.
Con el agradecimiento a todos los asistentes y
animando a acercarse a este trabajo terminaron sus palabras.
Dª Amelina Correa Ramón
La autora del prólogo del libro, Dª Amelina Correa Ramón, que no quiere restarle un ápice de méritos al autor que es su padre, tomó la
palabra, después de un profundo agradecimiento a los miembros de la
presidencia, asistentes e Institución, que ha hecho realidad esta publicación
así como a D. Miguel Beas Miranda colaborador en la obra, manifestó que había
recibido el legado de su padre con un contenido de dos centenares de
valiosos documentos producto de un
trabajo de investigación durante muchos años.
Lección práctica de Geografía
Citó al Pedagogo D. Andrés Manjón, en cuya aula de esta Facultad se está haciendo este acto,
con el que mi padre tenía una gran afinidad y al que tenía en buena estima por su modo de enseñar y sistema
pedagógico, que él tuvo muy en cuenta y puso en práctica durante su labor educativa.
En las "librerías de viejo", encontró mucha documentación
Su proyecto de trabajo, versado en la educación como
testimonio revelador durante los siglos XIX y XX, tuvo como base su experiencia
personal, la documentación y materiales
adquiridos en las librerías de viejo, fotografías históricas, contacto con
personajes versados en esta materia, de tal manera, reconoce Dª Amelina, que su
casa era un verdadero centro del saber.
Facultad de Ciencias de la Educación
Recibí la herencia de esta gran encomienda que se
encuentra depositada en el Campus de Ceuta y en esta Facultad donde su
contenido será fuente de documentación para trabajos de investigación, tesis
doctorales, y materiales didácticos donde pueden beber los futuros educadores
que se dedique a esta encomiable labor.
Campus universitario de Ceuta
Hace un recorrido por el contenido del libro y cuenta
como en su visita a la Sala Cossío en el Museo Pedagógico Sierra Pambley en León, se encontró con una gran cantidad de material pedagógico como el que utilizó su
padre,
Museo Pedagógico Sierra Pambley, (León)
Materiales pedagógicos en el Museo Sierra Pambley
la concepción humanística del saber, los métodos de enseñanza, los
recursos pedagógicos, los materiales para el aula y las conexiones con
determinados personajes,
Francisco Giner de los Ríos
Gumersindo Azcárate
Manuel Bartolomé Cossío
Francisco Giner de los Ríos, La Institución Libre de la Enseñanza,
Gumersindo Azcárate, Manuel Bartolomé Cossío que crearon un nuevo proyecto
educativo.
Pedagogía Manjoniana, enseñanza en contacto con la Naturaleza.
El maestro, José Medina Villalba, enseña a sus alumnos las partes de la flor. (1970)
La experimentación y el contacto con la Naturaleza, (alguno de los pilares sobre los que se
sedimenta la Pedagogía Manjoniana) estuvieron siempre presente en su metodología,
que los niños realizaran sus propios instrumentos y materiales de aprendizaje; manifiesta Amelina que, en la
visita al museo de Cossío, observó un termómetro que había sido realizado por
los alumnos,
esto le trajo a la memoria un higrómetro que habían construido los
alumnos de su padre, donde figuraba un niño que, según el tiempo que hacía, se
ponía de cara para salir de un edificio, o le daba la espalda, movido por una cuerda que se
encogía o dilataba.
Antonio Machado
Con el poema que D. Antonio Machado hizo a la muerte
de D. Francisco Giner de los Ríos
terminó su intervención.
“Cómo se fue el maestro
la luz de esta mañana….
Y hacia otra luz más pura
partió el hermano de la luz del alba,
del sol de los talleres,
el viejo alegre de la vida santa…
D. José Antonio Naranjo Rodríguez
D. José Antonio Naranjo Rodríguez, Decano de la
Facultad de Ciencias de la Educación, agradeció el legado depositado en la Facultad
y de éste libro a través del que se revindica la figura del maestro, de una
figura que a través de los tiempos siempre ha estado en entredicho, con
diversos nombres, ahora reconocidos como “Titulados de Educación Infantil”,
habiendo dejado en el anonimato ese maravilloso apelativo con el que siempre se
le ha reconocido el de MAESTRO.
La prensa siempre nos ha vapuleado, pero nos sentimos
orgullosos de lo que han sido los que pasaron, y de vosotros los futuros
maestros aquí presentes.
Dª María Dolores Suárez Ortega
Dª María Dolores Suárez Ortega Presidenta de los
miembros que intervinieron, agradeció el quehacer realizada por D. Antonio Correa
Acosta, elogiando la magnífica labor del maestro, palabra extraordinaria ,
indicando que la tarea educativa y de enseñanza comienza desde la cuna y no
termina nunca.
La historia de este libro, es mi propia historia que
yo he vivido.
No son los medios solamente lo más importante, aunque
jueguen su papel, lo importante es las ganas de enseñar, porque a pesar de la
cantidad de medios con los que hoy se cuenta no está hecho todo, lo sustancial
es saber cómo transmitir, lo que se va a enseñar, cómo, dónde, a quien…
Es un orgullo tener este libro en nuestras manos.
Esfuerzo, trabajo y tesón es lo más importante, con
este homenaje se hace reconocimiento a la labor de un maestro ejemplar.
Felicitó a la hija, a Miguel Beas, familiares y demás
asistentes.
Con un prolongado aplaudo se cerró este acto académico.
REPORTAJE FOTOGRÁFICO
José Medina Villalba, entrega a Dª Amelina Correa Ramón, su obra Pedagógica:
Escuelas del Ave María de Granada, 118 años de Historia. Colonia de Valparaiso
(1889-2007)
Dª Amelina Correa Ramón y D. Miguel Beas Miranda
Alumnos de la Facultad de Ciencias de la Educación, trabajando en equipo.
La cultura del pasado y del presente. Monasterio de Cartuja
y Facultad de Ciencias de la Educación
José Medina Villalba
Como directamente aludida -soy Amelina Correa Ramón, la hija del autor de "A la luz de la razón. Memorias de un maestro de principios de los '60"-, quiero manifestar mi enorme y sincero agradecimiento por el espléndido reportaje sobre el acto que has realizado y colgado en este blog. Has hecho una labor verdaderamente magnífica, y con un completísimo acompañamiento de fotografías e ilustraciones diversas, que pueden servir para que, quien no estuviera allí, se haga cumplida idea de cómo fue el acto, y los que estuvimos, para que podamos acudir siempre.a este completo recuerdo gráfico y literario. De verdad, ¡ME HA ENCANTADO!!
ResponderEliminarMi agradecimiento, a Amelina Correa Ramón por este comentario, sobre el trabajo realizado, con la enorme satisfacción de haber dejado plasmado, para la posterioridad, el testimonio de un acto en el que se puso de relieve la figura de una persona que entregó su inteligencia y su vida a esta causa y grandiosa labor, por cierto, no valorada por la sociedad en la medida que se merece, como es la de ser educador, palabra que encierra en su significado todo un compendio de sabiduría.
Eliminar"La educación es la mejor palanca que puede mover el mundo". Gracias de nuevo.
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ResponderEliminarA LA LUZ DE LA RAZÓN
ResponderEliminarPepe,
me alegro de poder leer tu trabajo sobre Don Antonio Correa Acosta.
Tuve la ocasión, estudiando Magisterio en nuestra querida Escuela de Magisterio “La Inmaculada” del Ave María, de conocer a Don Antonio.
Fue entre los años 1.975-1.978, con motivo de una charla que impartió a los estudiantes de Magisterio, entre los que me encontraba.
De Don Antonio Correa Acosta, tres recuerdos tengo, tres:
-Su presencia.
-Su mirada.
-Su palabra.
El sesgo que se contempla en la portada del libro lo recuerdo perfectamente:
eso fue lo que me impresionó desde el momento que le vi,
un maestro de escuela con presencia, mirada y palabra, con todo su ser:
-sistemático,
-pensamiento abierto
-estructurado
Don Antonio Correa Acosta me dejó claro lo que yo quería ser: MAESTRO DE ESCUELA, y así lo ha sido.
No puede ser casual que Don Antonio Correa Acosta y nuestro Don Andrés Manjón fueran dos seres humanos tan afines en el modo de ser maestro, la pedagogía y la práctica docente.
Si el hogar de Don Antonio Correa Acosta fue un auténtico centro del saber – su enorme biblioteca hoy generosamente distribuida por centros de magisterio-, digo, el hogar de Don Andrés Manjón, nuestras queridas escuelas del Ave María, también fue un auténtico centro del saber distribuido por las distintas escuelas del Ave María.
Don Antonio Correa Acosta, Don Andrés Manjón y Don Francisco Giner de los Ríos coinciden en su concepción humanística del saber:
-Libertad de enseñanza
-Museo escolar
-Materiales en el aula
-Residencia para estudiante
-Colonias
-Misiones Pedagógicas
-La experimentación
-Elaboración de materiales de aprendizaje
-Enseñanza al aire libre
A Don Francisco Giner De Los Ríos,
por Don Antonio Machado
Como se fue el maestro,
la luz de esta mañana
me dijo: Van tres días
que mi hermano Francisco no trabaja.
¿Murió?... Sólo sabemos
que se nos fue por una senda clara,
diciéndonos: Hacedme
un duelo de labores y esperanzas.
Sed buenos y no más, sed lo que he sido
entre vosotros: alma.
Vivid, la vida sigue,
los muertos mueren y las sombras pasan;
lleva quien deja y vive el que ha vivido.
¡Yunques, sonad; enmudeced, campanas!
Y hacia otra luz más pura
partió el hermano de la luz del alba,
del sol de los talleres,
el viejo alegre de la vida santa.
...¡Oh, sí!, llevad, amigos,
su cuerpo a la montaña,
a los azules montes
del ancho Guadarrama.
Allí hay barrancos hondos
de pinos verdes donde el viento canta.
Su corazón repose
bajo una encina casta,
en tierra de tomillos, donde juegan
mariposas doradas...
Allí el maestro un día
soñaba un nuevo florecer de España.
(https://youtu.be/KPmPckvwQlM)
Pepe,
del hermosísimo poema de Don Antonio Machado quiero resaltar los versos:
Sed buenos y no más, sed lo que he sido
entre vosotros: alma.
Estos versos constituyen el eje de mi labor como maestro de escuela- ya próxima a su fin- y los tengo colocados en el blog de mi clase (http://blogdelaclasededonje.blogspot.com.es/)
Mi vida es mi escuela.
Todo lo aprendí ( y he tratado de practicarlo durante toda mi carrera en el Ave María) de mis dos maestros :
1º.- Don Andrés Manjón. ( estudiando la Pedagogía Manjoniana)
2º.- Don Francisco Giner de los Ríos. ( le descubrí gracias a Aurelia, mi profesora de Psicología en “La Inmaculada”)
Doy las gracias a la vida por haber estudiado y practicado todo lo aprendido de ambos.
Doy gracias a la vida que Don Antonio Correa Acosta con su paso por la escuela nos haya dejado A LA LUZ DE LA RAZÓN, el testimonio de la BELLEZA DEL TRABAJO DE MAESTRO DE ESCUELA.
Un abrazo, Pepe, maestro y amigo.
Jesús Amaya
Amigo Jesús, dramaturgo, literato, y sobre todo educador.
EliminarSabía que tu labor docente no te permitiría asistir a este evento, por ti y otros muchos que hubieran deseado asistir y por los numerosos seguidores, en todo el orbe, de mi blog, no podía dejar en el anonimato este magnífico acto, el que Amelina ha querido dedicarle a su padre con la presentación de "A LA LUZ DE LA RAZÓN", y sobre todo para que quedara constancia en los anales de la eternidad, -que milagrosamente tenemos en "LA NUBE" ¡Qué misterios! -
Cuando tu comenzaste esta grandiosa andadura del Magisterio, a finales de la década de los setenta, yo recorría en ella cuatro lustros, por suerte conocí a D. Antonio Correa Acosta, y con él todas esas cualidades y maneras de actuar, dentro de la profesión, siguiendo los pasos de los grandes educadores del pasado siglo, -entre ellos nuestro D. Andrés Manjón- que debe poseer un maestro y que él fue un gran portador y ejecutor de todas ellas.
Como muy bien dices, nuestro hogar, de D. Andrés Manjón, su Pensamiento, Filosofía, y Pedagogía ha sido el mejor legado del saber que nos dejó para nuestras Escuelas, sus maestros y para la infinidad de pedagogos y futuros educadores que nos visitan y a los que, como guía, les hago llegar el contenido esencial de la Pegagogía Manjoniana.
Deseo que tal como tu has llevado como escudo y norma el lema manjoniano cuando dejes el testigo de esta carrera de relevos, los que te sucedan sepan portarlo a su término final con la misma dignidad y ejemplaridad, nuestro Ideario, como tu lo has hecho.
Gracias por tu comentario. Un fuerte abrazo.
Os estoy enormemente agradecida a ambos por las palabras que dedicáis a mi padre. Estos comentarios nos emocionan profundamente. Gracias, de todo corazón, por compartir recuerdos, evocaciones literarias e ideales.
ResponderEliminarMi "torpeza" para las cuestiones informáticas hace que no sepa cómo registrarme aquí para aparecer con mi nombre. Soy nuevamente Amelina Correa, aunque el comentario aparezca publicado otra vez como "Anónimo".