LA INMACULADA EN LAS ESCUELAS DEL AVE MARÍA

“CUANDO  MARZO MAYEA,  MAYO MARCEA”

El refranero español es sabio, y aunque en algún caso, no se acomode a las circunstancias del momento, en el acontecimiento que nos ocupa hoy, nos ha “venido como anillo al dedo”, frase muy utilizada en los glosarios gauchescos.          Es decir, llegó en el momento oportuno, aunque no fuera de sumo agrado para los visitantes de este día a las Escuelas del Ave María.

Este refrán que aparentemente parece un trabalenguas, nos manifiesta claramente que, cuando en marzo hace el tiempo propio de mayo, en mayo hará tiempo de marzo.

Para suavizar un poco el cielo cubierto de un gris oscuro, con amenaza de lluvia, recordemos aquella máxima del escritor ruso León Tolstoi: “El secreto de la felicidad no es hacer siempre lo que se quiere, sino querer siempre lo que se hace”.

Esto es lo que ha demostrado, el mayor grupo de visitantes, a los que he tenido el honor de acompañar esta mañana, a pesar de la climatología, de la lluvia intensa, fieles cumplidores de su deber, queriendo disfrutar de lo que por estos lares van a ver.

 A las diez y media, bueno, echémosle unos minutillos más, para los rezagados, estaban impacientes, esperando a las puertas de entrada al Colegio, junto a sus dos profesores, doña Isabel Rodríguez Peralta y D. Juan José Medina Rodríguez, esperando, para dar comienzo a este paseo mañanero,

envuelto en poesía y belleza, con clamores y voces de juventud y de niñez, con gorjeos de aves, y musicalidal orquestal de aguas de un río, que en otros tiempos dio oro,  hoy susurros de agua viva, envueltos en Pedagogía, que al fin y al cabo, es lo que por estos lares se respira.

El grupo más numeroso que he acompañado, en las numerosas visitas que han venido al Colegio, yo diría, llamándole en numeración ordinal, octogésimo.
A pesar de que permanecieron durante todo el recorrido, bastante atentos y con un comportamiento correcto, quizás porque al final los truenos arreciaron, la tormenta, y el agua comenzó a caer con gran intensidad, lo cierto es que, más o menos, terminamos como el “Rosario de la Aurora”, quedando un número bastante reducido para la visita al museo. 

                                                   Los pocos alumnos, con sus profesores, que finalizaron la visita.

(Espero que los profesores no se lo tengan en cuenta, a los que vi marchar "bajo la lluvia, pero sin cantar".)

                                        En dirección a la sala de usos múltiples

Para dar comienzo a la introducción, tanto para el que les iba a hablar, como para el numeroso grupo se pudiese sentir cómodo, nos ubicamos en la sala de usos múltiples.

 El monólogo del guía, procurando hacerlo de la forma más amena e intuitiva posible, con el objeto de tener captada la atención de los ochenta novicios, aspirantes a ser profesionales de la educación, lo realicé de pie, como siempre fue norma mía, cuando desempeñaba la labor de maestro. (Siempre me gusta usar esta palabra, maestro, más que la de profesor, por aquello de que el mejor Maestro digno de imitar fue Jesucristo).

Tenía de esta manera controlado al auditorio y cuando, en algún momento, observaba que algunos intentaban salirse un poco del contexto, "cuchicheando", basta que, sin dejar lo que relataba, me dirigiera hacia ellos, simplemente con la mirada, conseguía que se metieran en situación.

Los pasos a seguir en este monólogo fueron:

-Bienvenida.

                                                    Valle de Valpaiso

-Situación del Colegio.

             La escuela que le tocó vivir

-Orígenes de Manjón: Aldea, padres, escuela, maestro que le tocó vivir.

-Seminario,

-Doctor en Derecho civil y canónico.

-Catedrático.

-Sacerdote.

-Canónigo en la Abadía del Sacro Monte.

-“La Maestra Migas”.

-Nacimiento de las Escuelas.

-La compra del primer carmen.

-El carmen albaicinero.

-Recorrido por el Colegio, contemplando, en los distintos miradores, la belleza y el encanto del paisaje.

-Intentando despertar la poesía que existe realmente en el Valle de Valparaiso.

                                      Clase de Anatomía. Al aire libre. El aparato circulatorio

-Una clase al aire libre.

-Los puntos fundamentales en los que se basa la Pedagogía Manjoniana.

-Un breve descanso para saborear las ricas tortas de chocolate de Mari.

-Los tres vehículos que utilizó Manjón, y anécdotas sobre ellos.

- El mapa gigantesco de España y su utilización.

-Los diversos gráficos que utilizó Manjón para, a través del juego, la enseñanza de las distintas asignaturas.

-Una lección práctica sobre el análisis gramatical.

-Visita a la capilla y a sus obras artísticas.

Finalmente, las habitaciones que utilizó Manjón: despacho, dormitorio y enseres.

Se concluyó con la firma en el libro de visitas del profesor D. Juan José Medina Rodríguez, para dejar constancia de la visita.

La lluvia, llegada como agua de mayo, y nunca mejor dicho, nos siguió acompañando durante todo el recorrido de vuelta, el agua había lavado el bosque que brillaba con más intensidad, la variedad de verdes y amarillos de la vestimenta de la floresta, 

lucían con más intensidad.
 la blancura del celindo (filadelfo) a modo de centinela, en medio del camino, perfumaba el ambiente y podía servir de guía para, con los ojos cerrados, seguir la senda del camino, había dejado en el suelo las lágrimas de su llanto, al ser golpeadas por las gotas de la lluvia, en diminutos pétalos blanquecinos.

Había gotas convertidas en perlas, se habían quedado incrustadas en las hojas de los árboles formando un rosario de coral.

Una arcilla movía su hociquito, en una de las ramas de los almeces, del camino, masticando algunas de las nacientes almecinas, y con una mano me daba la impresión de que me decía, adiós.

De vuelta a casa, ya relajado y tranquilo, meditaba sobre cómo poder hacer llegar a los visitantes, lo más rápido el recuerdo de lo vivido, esta mañana, y además para que todo el mundo sepa, que hay jóvenes que ansían ser educadores, la mejor profesión que existe, sin menosprecio de las demás.

Me puse en el ordenador y lancé a la nube este mensaje, animando a los bisoños y futuros maestros para que sigan adelante.
 A lo mejor algún día lo experimentado en este matinal, les pueda servir en algún momento.
Sirva este archivo de recuerdo, a la visita realizada, a las Escuelas del Ave María el doce de mayo de 2016, por los alumnos del Centro de Magisterio la Inmaculada. Primero de Educación Primaria.

                                
                                     José Medina Villalba

                              REPORTAJE FOTOGRÁFICO
Fotografía: archivo personal de José Medina Villalba
Colaboración fotográfica, durante el recorrido: José Ángel Terra Vera, con selección de fotografías y adaptación, por José Medina Villalba.