Son
la nueve de la mañana, de un primaveral día albaicinero, el bullicio de las
gentes de este barrio se hace notar, se respira a jazmines, nardos y hierbabuena
que surgen a través de los cármenes y de los balcones que ofrecen, en sus
macetas repletas de claveles, un espectáculo oloroso excepcional.
En
Plaza Larga, centro neurálgico, se percibe la agitación de las gentes, el
sonido metálico de las persianas de los comercios desgarrando el ambiente para,
durante el día, ofrecer a sus gentes los productos que allí se venden; los
tenderetes del mercadillo de flores, ropa, frutas comienzan a instalarse y van
cambiando el colorido multicolor de este lugar.
Se
escuchan los pregones de la pescadería de la Calle Panaderos, que proclaman las
excelencias de los boquerones recién llegados de Motril, la pescadilla de Nerja
o las gambas de Huelva.
-¡Niñas,
recién pescados, están que saltan de la caja!
Es
la voz de Carmelilla, guapetona “pescaera”, que atrae a sus clientas que se van
acercando para contemplar la mercancía.
-La
suerte está echada. Vecina compra la papeleta para el gran premio de hoy, una
rica paletilla de pata negra.
Antoñillo
tiene su clientela, con la paletilla de cerdo sobre el hombre, ufano y
orgulloso va pregonando por Calle del Agua el trofeo que hoy ofrece en la rifa
que diariamente hace por el Albayzín.
-Vamos
niño termina la tostada y el vaso de leche, que vas a llegar tarde al colegio.
Es “La salvaora” que insta a su hijo Juan Andrés, para que apure el desayuno en
la Cafetería “La Pasteles”.
Alguien
grita, contemplando el cartel de premios, en la puerta de “Apuestas y loterías
el Berna”.
-¡Me
ha tocado, me ha tocado!
Por la Cuesta del Chapiz baja a toda
prisa una chiquilla con su macuto cargado de libros, está en el curso séptimo
de E.G.B. se llama Estrella Morente, sí querido lector, la que hoy día es
conocida mundialmente por ser la que ocupa dentro del ranquin flamenco el
puesto más privilegiado, la que se enorgullece de haber sido alumna de las
Escuelas del Ave María, de la formación que recibió en este Colegio, de sus
compañeros y profesores.
Se estaba preparando un viaje a
Burgos para homenajear a los recién nombrados beatos, por Juan Pablo II, los
avemarianos D. Manuel Medina Olmos y D. Diego Ventaja Milán.
Un grupo de alumnos acompañados por
sus profesores iban a representar la obra de D. Manuel Medina Olmos, “El día de
Inocentes”, zarzuela con una partitura musical del maestro Francisco Alonso, en
el teatro de la Caja de Ahorros del Círculo Católico de Burgos. En el escenario del colegio esperábamos a
Estrella, que ya despertaba en el cante, para hacer una grabación de la música
que correspondía a la obra. Entre bambalinas Estrella cantó y pudimos llevar su
voz a Burgos.
Caja de Pandora
Estrella Morente Carbonell
No voy a destapar la caja de pandora
de esta excelente figura, donde se guardan todos sus éxitos, triunfos, discos
grabados, actuaciones a nivel nacional e internacional en los más importantes
escenarios, películas, apertura de juegos internacionales…, siendo portadora de
las excelencias del cante flamenco, basta con abrir internet poner su nombre y
allí nos podremos empapar bien de esta gran figura.
¿Entonces? Alguien, que esté leyendo
se preguntará, ¿qué se puede decir de esta gran figura, que no esté dicho?
He aquí el testimonio de Estrella en
su periodo escolar, en las Escuelas del Ave María, de la Casa Madre. Palabras
textuales escritas por Estrella y enviadas por correo los días 12 y 13 de junio
como comentario hecho al archivo, del blogg granadaluzcoloryliteratura que
lleva por título: EL SACROMONTE. HOMENAJE A SUS GENTES. EMBRUJO, PASIÓN Y ARTE.
EL PASADO EN MIS RECUERDOS
Gracias a la vida que me ha dado tanto… He tenido la suerte de tener unos
padres maravillosos que me llevaron al Colegio del Ave María y me dieron la
oportunidad de aprender y estudiar rodeados de naturaleza e historia en los
bajos de las faldas de la Alhambra…¡El colegio con más arte del mundo!
¡Ojalá todos los niños tuvieran el privilegio de aprender lo que es la
hoja perenne y caduca de los árboles que pueblan la ribera del cauce del Darro
a su paso por allí!
Nuestro colegio no era normal…, era especialmente mágico…, veredas,
cuevas, arroyos, valles…, etc., kilómetros y kilómetros de vegetación silvestre
que desembocaba en el histórico barrio gitano del Sacromonte. Aromas a
hierbabuena, eucalipto, jazmín…, a rosas y otras flores que nacían cerca de las
ventanas de nuestras aulas… ¡Inolvidable! (Aunque más que ventanas parecían ser
cuadros pintados por grandes artistas enamorados de Granada…Desde la mirada
parecía ser una estampa única de la Sierra, del Valle de Valparaiso, y de la
mismísima Alhambra).
Aquellos recreos en los que salíamos corriendo “verea arriba” hasta la
cueva de “la Mari de las tortas”… ¡Qué ricas! ¡De tomate, de chocolate o de
aceite!
¡Qué divertidos nuestros juegos!... Con las almecinas y otros frutos que
nos regalaba la naturaleza y nuestro propio entorno…
Y esas excursiones… Esas primeras salidas tan divertidas en equipo en las
que solíamos cantar durante todo el trayecto hasta quedar afónicos de reír y
contar chistes…
Ermita de S. Miguel
Pero una de las cosas que más agradezco al colegio es que nos enseñaran a
valorar nuestro propio entorno. Nos llevaran de visita a nuestros barrios,
nuestras colinas y montañas y a nuestra Fuente del Avellano… A la ermita de San
Miguel o a los jardines del Generalife…
Teníamos un mapa gigante, al aire libre, donde los niños aprendíamos las
distintas provincias de Andalucía saltando de un color a otro.
Grupo de la Encarnación de Torcuato Ruiz del Peral
En la Capilla del Ave María celebramos la Primera Comunión de mi hermana
Soleá, también estudiante y enamorada del colegio.
A mis profesores les dejo para el final, ya que me causa una gran emoción
recordarles y agradecerles…, al igual que a nuestro querido Director Don José
Medina Villalba, por tantas cosas importantes que nos ha enseñado y nos han
aportado en la vida. Todos ellos supieron transmitirnos conocimientos, valores,
pero esa sabiduría siempre la emplearon a través del diálogo, de la paciencia,
perseverancia y del cariño; algo que siempre les agradeceré… Para mí cada una
de esas personas era muy importantes y fueron verdaderamente ejemplares.
Quiero que sepan que siempre están presentes en mi corazón.
Mil gracias siempre.
Vuestra Estrella.
Fdo. Estrella Morente
Estrella sigue escribiendo el día 12 de junio.
Málaga, doce de junio de dos mil trece.
Querido D. José:
Le escribo estas líneas para manifestarle mi orgullo como granadina y
como alumna suya que he tenido la oportunidad de ser.
Ahora que he podido conocer más a fondo su obra y su labor, me doy cuenta
de la suerte que hemos tenido, tanto mis compañeros como yo, de haber
coincidido en el periodo de tiempo en el que dirigía las Escuelas del Ave
María, Casa Madre, y empiezo a comprender muchos momentos de máxima
sensibilidad que viví en el colegio.
Uno de los recuerdos más importantes que tengo de Vd. Es la firmeza y
sabiduría con la que solía llevarnos, las cuales estaban muy lejos de la
impaciencia y de la soberbia, y en consecuencia dando paso al diálogo con el
niño y con lo que teníamos que aprender.
Clases al aire libre
Ahora lo entiendo… Detrás de todo eso había un gran hombre… Sabio y
culto, que ha volcado su vida en la creación y en hacer el bien a los demás.
Mi más sincera enhorabuena por elaborar una buena obra que conlleva tanto
sacrificio y tanto trabajo recogido a lo largo de toda una vida, que ahora pone
al alcance de todos.
Recomiendo a todo aquel que se considere un poco sensible que se acerque
a la obra de D. José Medina Villalba.
Para siempre, GRACIAS desde el corazón. Para siempre… GRACIAS.
Fdo. Estrella Morente
El lector puede, en estos momentos,
entender que la publicación de este segundo mensaje lleve aparejado la
vanagloria de mi persona, nada más lejos de la realidad, simplemente el
agradecimiento a Estrella y a mi obra literaria: ESCUELAS DEL AVE MARÍA DE
GRANADA. 118 AÑOS DE HISTORIA. COLONIA DE VALPARAISO. (1889-2007).
Pienso que Estrella está hablando en
nombre de los cientos y miles de alumnos que han pasado por estas Escuelas del
Ave María y otras tantas esparcidas por distintos lugares de la ciudad y de la
provincia y que no han tenido la oportunidad de hacerlo, pero lo llevan en lo
más íntimo de sus pensamientos, el agradecimiento a sus maestros y al colegio.
No puedo por menos dejar constancia, del correo enviado a Estrella Morente Carbonell, en contestación
a sus dos mensajes.
Granada 15 de junio de 2013.
Querida y muy apreciada Estrella:
Son las dos de la madrugada, en el
trasfondo de la noche se oye el toque de la Campana de la Vela, que entra por
mi ventana, hace calor, mucha calor; estoy a punto de irme a descansar después
de una larga jornada de trabajo, estoy terminando de preparar el último archivo
de mi blogg, es un homenaje a la diversidad de artistas que han salido de esa
cátedra del cante y el baile que es el Sacromonte. Lleva por título: EL
SACROMONTE HOMENAJE A SUS GENTES. EMBRUJO, PASIÓN Y ARTE. EL PASADO EN MIS
RECUERDOS. Un pajarito misterioso me invita a abrir el correo, no me apetece,
pero al final me decido. Comienzo a leer el último correo que ha llegado,
lentamente voy leyendo, la pesadez de los párpados se va disipando conforme
avanzo en la lectura, la emoción me va embargando por momentos, mi antigua
alumna se deshace en alabanzas a su Colegio, su maestro, su obra y profesores.
D. José Miguel Sánchez Molina
Señorita Dñª Paqui Ávila Lorca
D. José Cano Ortega
Señorita Dñª Mari Carmen Chamorro Muñoz
Carmen Úbeda Conejero
Señorita Dñª Bernarda Carrillo Baeza
D. José Pino Sabio. Capellán del Colegio
Señorita Dñª Virginia Martín Robles
Señorita Dñª Mari Carmen Medina Arroyo
Señorita Dñª Pepita Muñoz Guillén
D. Francisco Ríos Gutiérrez
Estrella con su padre Enrique Morente
Señorita Dñª Virginia Martín Robles
Cuando el tiempo implacablemente ha
pasado y aquella niña, lista, espabilada, con su simpatía, sonrisa y alegría a
flor de piel, trasmitía y contagiaba a compañeros y profesores, es ya toda una
mujer, madre de familia y artista consumada de fama mundial, se dirige al que
fue su maestro, no tengo más remedio que agradecerle sus alabanzas hacia mi
persona y los recuerdos que sobre mi estima tiene y sobre todos los profesores
que en aquel momento tuvo: D. José Miguel Sánchez Molina, D. José Cano Ortega,
D. Francisco Ríos Gutiérrez. Señoritas: Dnª Bernarda Carrillo Baeza, Dñª Paqui
Ávila Lorca, Dñª Pepita Muñoz Guillén,
Dñª Virginia Martín Robles, Dñª Mari Carmen Medina Arroyo…
Mis méritos no son otros sino haber
hecho lo que el deber me imponía y nuestro fundador D. Andrés Manjón nos legó,
trasmitir a nuestros alumnos los valores que hacen a las personas seres
completos corporal y espiritualmente. Por todo lo dicho, no tiene mayor mérito
lo mío, sin embargo, te agradezco sinceramente tus palabras.
Me llena de satisfacción los
recuerdos que perduran en tu memoria sobre el colegio, profesores, compañeros,
paisajes, excursiones…, vivencias imborrables que estarán siempre contigo.
Con tu permiso el próximo archivo de
mi blogg va a ir dedicado a tu persona, creo que es importante que la gente que
me sigue, y que son muchos a nivel mundial, conozcan tus experiencias en las
Escuelas del Ave María. Quiero trasmitir ese mensaje que una chiquilla hace de
su colegio; además lo haces con una elegancia literaria que merece un
sobresaliente.
Espero, cuando puedas, dediques un ratito
al archivo del Sacromonte; contando con tu beneplácito prepararé el que voy a
titular: GRANADA TIENE UNA ESTRELLA QUE BRILLA EN TODO EL MUNDO.
Gracias por tus mensajes recibe, del
que fue tu maestro y se siente orgulloso de su alumna, un fuerte abrazo que
deseo trasmitas a tu madre Aurora, a tus hermanos Soleá y Enrique, así como a
toda tu familia. Un recuerdo muy especial a esa gran figura del cante, tu padre
Enrique Morente que, desde allá arriba, se sentirá orgulloso y satisfecho de su
familia, y de esta hija que sigue, con su personalidad y estilo propio,
trasmitiendo la sabiduría que le legó.
Fdo. José Medina Villalba.
